Son las instituciones financieras las que deben responder por fraudes a tarjetas bancarias, esto debe ocurrir aunque el consumidor no cuente con un seguro, porque es la empresa la encargada de entregar un servicio con mecanismos profesionales.
En la actualidad, el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) junto a la Policía de Investigaciones (PDI) lanzaron la campaña «Tarjeta Segura» que tiene como objetivo dar recomendaciones a los consumidores para prevenir ser víctimas de estafas y clonaciones.
Desde su creación, en 1932, el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) y las organizaciones predecesoras han desempeñado un rol fundamental en la economía nacional. A lo largo de los diferentes regímenes y orientaciones gubernamentales, distintos organismos con variadas atribuciones se han hecho cargo del tema del consumo y que constituyen los antecedentes del actual Sernac.
Tarjeta Segura:
Luego de que en 2012 el Sernac recibiera cerca de 4.200 reclamos por este motivo, en especial de tarjetas de crédito, donde el 71,6% de ellas son bancarias, se pensó en lanzar el programa de Tarjeta Segura para evitar fraudes.
Las empresas e instituciones financieras son las que deben responder frente a los consumidores, porque son ellas las responsables de entregar servicios profesionales. Las empresas son responsables por los dineros que son sustraídos de forma ilegal a los consumidores. Es cierto que por las estafas responden los delincuentes y que el Ministerio Público debe investigar, pero de cara a los consumidores, y desde el punto de vista patrimonial, son las instituciones financieras las que deben responder por cualquier tipo de fraude, esto aunque los consumidores no cuenten con seguros externos contratados.
Las empresas deben entregar un servicio seguro, como «la Ley del Consumidor se los impone».
Sin embargo, el 33,3% de las quejas fueron respondidas por las empresas, un 24% no fueron acogidas y un 19,3% fueron asociadas a mediaciones colectivas realizadas por el Sernac. Por fraude o suplantación de identidad se recibieron 350 reclamos; por Pishing (estafas por mail) 145 reclamos; por Pharming (a través de sitios web falsos) 46 reclamos.
Clonación de tarjetas:
Es extraer la información contenida en la banda magnética y copiarla en otra tarjeta para cometer ilícitos. Este delito infringe las leyes Nº 19.223 y Nº 20.009 por delito informático y uso fraudulento de tarjetas de crédito y débito, respectivamente.
Consecuencias de la clonación de una tarjeta:
Que terceros giren dinero y paguen productos y/o servicios con cargo a su cuenta, como si usted los hubiera realizado.
- En caso de pérdida, hurto o robo de la tarjeta, el titular se debe comunicar de inmediato con la institución donde contrató el producto (banco, casa comercial, farmacia), a través de los servicios informados para una situación como esa, por ejemplo, teléfono o Internet, y efectuar el bloqueo.
- Cuando avises, el operador debe registrar la recepción y proporcionar al dueño de la tarjeta un número o código de recepción y la constancia de la fecha y hora de ingreso.
- Anota ese código y guárdalo. Será la prueba que acredite que efectivamente efectuaste la acción de bloqueo.
- Es recomendable hacer una denuncia en una institución policial apenas te percates de la pérdida.
- Cuando te llegue una nueva tarjeta, asegúrate de eliminar la antigua. Antes de botarla, rómpela y córtala en pedacitos con una tijera y tírala a la basura por separado.